viernes, 15 de noviembre de 2013

FAUNA

Fauna
En la región de la Estepa Pampeana se pueden encontrar diversas especies animales, con la particularidad de que viven en zonas sin árboles.
 Aunque han desaparecido el jaguar y el venado que siempre la habitaron, aún se puede encontrar una variada fauna. Entre los mamíferos, aves y reptiles que gobiernan la zona hallaremos comadreja colorada, vizcachas, jabalí y liebre europeos, ñandú, chimango, perdíz, calandrias, chingolos, horneros, lagartijas, iguanas overas y lagartos, o anfibios como el sapo y la ranita.



El Bosque Chaqueño ofrece una riquísima gama de animales que conforman la fauna de esta región: comadreja picaza, armadillo, puma, gato montés, carancho, cardenal, víbora de cascabel, lampalagua, boa, iguana, lagartijas y tortugas terrestres, entre otras muchas especies.





Bosque Serrano
Ocupa la altura media y baja de las sierras y presenta la existencia de mamíferos como la comadreja, el zorro gris y de las pampas, el gato montés, puma. Aves como la perdiz, paloma, martín pescador, cachalote o reina mora; y entre los reptiles encontramos la iguana overa y colorada, lagartos, culebra, yarará grande, chica y ñata, y cascabel.





Presentando la fauna de las laderas: pumas, zorrinos, picaflor coludo, águila, gavilán, cascabel, lagartos, ranas y sapos. En las Altas Cumbres predominan el puma, el zorro colorado, el cóndor, carpintero campestre, águila, serpientes y lagartos verdes

Habitantes de la llanura; a raíz de la acción depredadora del hombre, dos especies autóctonas de la pampa húmeda, la vizcacha y el ñandú casi se han extinguido.
Los animales que aún viven en esta zona son el carancho, la comadreja , el cuis, el chimango, la garza, el gato de los pajonales, el flamenco, el hornero, el jilguero dorado, la lagartija, la martineta, la laucha, el pájaro carpintero, la paloma dorada o torcaza, el pato, la rana, el sapo y el zorro gris.



La laguna de Mar Chiquita es un area protegida.
En esta reserva zoológica se encuentran la lampalagua, el conejo de los palos, el gato montés, el ganso, la mara, la martineta, la nutria, la víbora de la cruz;y entre las especies acuáticas hay cisnes, garzas, gaviotas, flamencos, patos, ranas, sapos y teros reales.





En la zona norte de esta laguna habitan carpinchos que corren peligro de extinción.












En la pampa seca se encuentran la corzuela o cabra del monte (que está en vías de extinción), el cardenal de copete rojo, la catita, el crespín, el gato montés, la perdiz montaraz, el puma, la vizcacha, el zorro gris y el zorrino.




 En las salinas habitan especies que casi están extinguidas en el resto del país. Esto se debe a que estas regiones permanecen casi inhabitadas por el hombre. Por ejemplo, sobreviven todavía los guanacos, las liebres patagónicas o maras el conejo de los palos.







La poblacion animal de la región de las sierras varía según la altura. Existen caburés, catitas verdes, comadrejas, comadrejitas enanas, calandrias, cuises moros, escuerzos, iguanas overas, jilgueros, lagartos, mulitas, murciélagos cola de ratón, martín pescador, palomas montaraces, pecaries, perdices serranas, pumas, ranas, sapos comunes, tordos y zorros En las zonas más altas hay águilas, cóndores, chingolos, halcones, jotes, lagartos, mirlos, picaflores, pumas y zorros colorados.





CARACTERISTICAS E IMAGENES













jueves, 14 de noviembre de 2013

FLORA

En las zonas de llanura, se conservan relictos del bosque chaqueño en las llanuras del norte y del oeste, caracterizados por la presencia de algarrobos, espinillos, chañares, talas y quebrachos.
En la región serrana, la vegetación se organiza sobre la base de la topografía, altitud, humedad, temperaturas y exposición a los vientos.
En el pie de las sierras se mezclan especies de la llanura con las del bosque serrano.
Entre 500 y 1.300 metros s.m. se establece el bosque serrano con la presencia del molle, el coco, el horco molle, el horco quebracho,
el manzano del campo y el piquillín.
A partir de los 1.350 y 1.700 msn se constituye una vegetación arbustiva como el romerillo y la carqueja.
Por encima de los 1.700 msn desaparece la vegetación, salvo en las quebradas donde se encuentra el tabaquillo. En las altiplanicies y cumbres reinan los pastizales de altura, gramíneas como la stipa y la festuca.
La llanura oriental cordobesa nos ofrece una vegetación formada por pastos blandos, que constituyen una alfombra, vegetal; son las hierbas típicas de las praderas, que suelen ser aprovechadas por el ganado de la región. Las especies más importantes son el ajo macho, la cola de zorro, la flechilla, el junquillo, la ortiguilla, la paja de las vizcacheras,  el pasto colorado y el pasto crespo, la paja voladora, el penachito blanco. Los arbustos bajos que más se observan en la pampa húmeda son el mío-mío y la carquejilla.
Ríos y lagunas Junto a los ríos y los bañados (terrenos húmedos que se inundan a menudo) crecen siempre juncos y cortaderas ya que allí hay una mayor humedad; entre las especies flotantes aparece principalmente la lenteja de agua.

También existen grandes poblaciones de saetas y totorales en las lagunas que se encuentran entre los ríos Tercero y Cuarto, hay pasto salado, barba de tigre, cachiyuyo y jume que crecen principalmente en las cañadas (canales que corren entre dos montes).
Los árboles que ocupan las partes más altas son de madera dura, como el algarrobo blanco, el atamisqui, el chañar, el guayacán, el mistol¡ y el quebracho blanco.
El algarrobo blanco podemos encontrarlo en la pampa seca, así como también el el caldén, el cardón, el chañar el espinillo, el mistol, el quimilo y el retamo.Antiguamente abundaban el itín, el molle blanco y el quebracho colorado, pero debido a la tala indiscriminada desaparecieron casi por completo.En las inmediaciones de las salinas sólo crecen arbustos capaces de vivir en suelos salitrosos. Hay, por ejemplo, brea, cachiyuyo, crespa, jarilla, jume palo azul, penca, quimilo y retama.
En las sierras En esta región se escalonan pisos vegetales, directamente relacionados con la altura de las sierras, se encuentran allí árboles y arbustos en las partes bajas más húmedas, que van siendo reemplazados al ascender.
En las zonas ubicadas por debajo de los 1.700 metros la vegetación está formada por el algarrobo blanco, el coco serrano, el mistol ,el quebracho blanco, el molle y el tala. A la sombra de estos árboles, abundan los arbustos como el espinillo, el chañar la jarilla y el romerillo, y debajo de los arbustos crecen las tradicionales hierbas o yuyos cordobeses: albahaquilla, menta, peperina, salvia y tomillo.
un poco más arriba, cerca de los 2.200 metros existen bosques de tabaquillo, cubiertos de líquenes y musgo. también hay helechos, carquejas y matas de zarzamora.
Los únicos árboles que crecen a esta altura son los molles, que ayudan a fijar el terreno.
En las zonas más altas, aproximadamente 2.800 metros, casi no se encuentran árboles. Hay pequeños arbustos, y gramíneas y pastizales que cubren el suelo.

El Espinal en la provincia de Córdoba


El este de la provincia de Córdoba estaba cubierto por grandes extensiones de bosques pertenecientes al Espinal Periestépico. Al expandirse el área agrícola hacia el oeste, la mayor parte de estos bosques desaparecieron como resultado del desmonte. Sin embargo, todavía se observan numerosos relictos, es decir, restos o reliquias de los mismos. Algunos de éstos consisten en unos pocos árboles o pequeños bosquetes de unas pocas hectáreas, mientras que otros son bastante grandes y hasta pueden superar las cien hectáreas. Además, existe una infinidad de árboles aislados de 'algarrobo' (Prosopis, varias especies), 'espinillo' (Acacia caven) y 'tala' (Celtis tala) en toda la región. Algunos relictos se transforman en fachinales (vegetaciones leñosas secundarias) al ser invadidos por 'chañares' (Geoffroea decorticans) y por los renovales de otras especies.
Lewis y Collantes (1973) en una reseña general del Espinal crearon varios distritos, reconociendo tres para la provincia de Córdoba. El 'Distrito Cordubense' del Espinal abarca los bosques y relictos situados hacia el noroeste de la provincia de Córdoba, los cuales presentan distintas especies del género Prosopis y es muy frecuente el 'quebracho blanco' (Aspidosperma quebracho-blanco). El 'Distrito Central' incluye los relictos más australes de la provincia de Córdoba, con creciente abundancia de 'tala' hacia el sur. El tercer distrito fue denominado 'Entrerrianense' por su similitud fisonómica con los bosques del Espinal de Entre Ríos. En la provincia de Córdoba este distrito comprende grandes relictos de bosques caracterizados por la presencia de la palmerita Trithrinax campestris (Foto 1).
Foto 1: Aspecto del Espinal con abundantes individuos jóvenes de la palmera Trithrinax campestris, con un 'chañar' (Geoffroea decorticans) en primer plano. Estancia 'Montes Grandes', Noetinger. (Archivo: "Palmeritas en Noetinger")
Caracterización de los remanentes de bosques
En los años 2003 y 2004 recorrimos parte del Espinal del este de Córdoba con el objeto de evaluar el estado de fragmentación y conservación de los remanentes de bosques. Observamos que los bosques del Espinal están prácticamente desapareciendo y su área está muy fragmentada. Sin embargo, pudimos visitar algunas áreas boscosas que variaban tanto en superficie, como en estado de conservación. En sectores correspondientes al 'Distrito Entrerrianense' visitamos bosques nativos con palmeras (Trithrinax campestris) entre las localidades de Noetinger, El Fortín y Chilibroste. En sectores correspondientes al 'Distrito Central' visitamos algunos pequeños remanentes de bosques sin palmeras. Entre ellas podemos mencionar: el establecimiento 'El Monte' próximo a Inriville; el lugar de referencia histórica denominado 'Cabeza de Tigre', cercano a Los Surgentes; lo que fuera la reserva de Cárcano próxima a la localidad de Ramón J. Cárcano; algunos relictos próximos a Villa María y otros cercanos a Cintra.
Los relictos más importantes son los de las estancias 'Montes Grandes', 'Montes Chicos' y 'El Chañar', próximas a Noetinger (Foto 2), con una superficie alrededor de 500 ha, pero el área está algo fragmentada. Los fragmentos más pequeños están bastante deteriorados, mientras que los fragmentos de mayor tamaño están muy bien conservados. A su vez, estos bosques se pueden dividir según la abundancia relativa de 'tala' y de la palmera T. campestris; aquellos lugares que parecen haber sufrido incendios más recientes, muestran mayor abundancia de palmeras. Además de estas dos especies se encuentran: 'algarrobos' (Prosopis alba y P. nigra), 'espinillo', 'sombra de toro' (Jodina rhombifolia) y 'chañar'. Existe además un estrato importante de arbustos y renovales y un estrato graminoso de muy alta cobertura. Los individuos de especies exóticas invasoras, tales como 'paraíso' (Melia azedarach) y 'morera' (Morus alba), son muy escasos salvo en los fragmentos muy pequeños o los que están cerca del casco y de los bretes. Los relictos cercanos a la localidad de Chilibroste son semejantes a éstos pero de menor superficie.
Foto 2Otro aspecto del Espinal con individuos adultos de la palmera Trithrinax campestris, Estancia 'Montes Grandes', Noetinger. (Archivo: "Más palmeritas")
En el casco del establecimiento 'El Monte' de la Sra Alma Rossi, ubicado sobre la margen sur del Río Carcarañá-Talamuchita cerca de Inriville, se observan majestuosos 'algarrobos' relictuales (Foto 3) mezclados con algunos individuos de 'eucaliptos' (Eucalyptus sp.) y 'morera'. La vegetación en galería del Río Carcarañá y su predecesor el Talamuchita o Río Tercero tiene los árboles del espinal con algunos sauces (Salix humbodtiana) y algunas especies exóticas. El bosque visitado comienza a unos 400 m del Río Carcarañá, tiene un estrato arbóreo de densidad variable a veces discontinuo (Foto  4). Las especies leñosas que se encuentran son: 'algarrobos' (Prosopis alba y Prosopis nigra), 'tala', 'molle' (Schinus sp.), 'sombra de toro' y 'chañar'. Hay un estrato arbustivo o de renovales de las especies arbóreas y un estrato herbáceo graminoso. El bosque está siendo invadido por exóticas, sobre todo'morera'.
Foto 3Hermoso algarrobo relictual junto al casco del establecimiento 'El Monte', Inriville. Al fondo, vista general del bosque. (Archivo: "Algarrobo en Inriville")

Foto 4Abra en el bosque del establecimiento 'El Monte', Inriville, con numerosos 'chañares'. (Archivo: "Bosque de Inriville")
Los relictos de la Reserva de Cárcano y Cabeza del Tigre, así como los cercanos a Villa María, tienen todavía algunos 'algarrobos', pero las especies nativas han sido prácticamente reemplazadas por las exóticas como 'morera' (Foto 5), 'acacia negra' (Gleditsia triacanthos), 'morera de papel' (Broussonetia papyrifera), 'ligustro' (Ligustrum lucidum), 'ligustrina' (Ligustrum sinense), etc.. Por el contrario, los remanentes de bosques cercanos a la localidad de Cintra consisten en un fachinal con unos pocos 'algarrobos' grandes y una acentuada invasión de la nativa 'chañar', probablemente debido a la capacidad de esta especie de rebrotar a partir de fragmentos de raíces.
Foto 5Bosque del Espinal invadido por la exótica Morus alba ('morera') en el centro; hacia atrás, individuo muerto de 'tala' (Celtis tala). Proximidades de la localidad de Ramón J. Cárcano. (Archivo: "Morera en Cárcano")
Cuatro amenazas sobre los remanentes del Espinal
Los bosques de esta región enfrentan fundamentalmente cuatro grandes amenazas:
a- desmonte
b- tala selectiva
c- ausencia de ganado o carga ganadera excesiva
d- invasión de especies leñosas exóticas.
La creciente demanda de tierras para la agricultura pone en peligro los bosques de esta región; el desmonte implica una reducción dramática de la biodiversidad y consecuentemente un aumento de la degradación de los recursos naturales. Existen afortunadamente algunos productores conscientes de este problema que, a pesar de las ventajas económicas que brinda la agricultura, procuran mantener a largo plazo los montes de sus establecimientos. La tala selectiva de las especies dominantes, sobre todo de 'algarrobos', favorece el aumento de algunas especies arbustivas como el 'chañar', a consecuencia de lo cual el bosque finalmente se transforma en un fachinal. La ausencia de ganado, paradójicamente, no parece favorecer la preservación del bosque, sino que estimula el crecimiento de enredaderas que terminan cubriendo totalmente a la vegetación e impidiendo su regeneración, tal como observamos en un establecimiento vecino a Noetinger (Foto 6). La carga ganadera excesiva también tiene un efecto perjudicial sobre la regeneración del bosque debido al pisoteo y ramoneo de la hacienda. La invasión de especies leñosas exóticas y el consecuente reemplazo de las especies nativas probablemente sea actualmente el problema más grave; varios remanentes de bosques han sido prácticamente reemplazados por 'morera', 'ligustro' y otras exóticas. Otros, como los bosques de Noetinger, están mejor conservados y si bien hay signos de invasión por especies exóticas, éstas están todavía muy lejos de comprometer a esta comunidad. Sin embargo, dado el peligro de que la invasión pueda ser relativamente rápida, es conveniente determinar la tasa de invasión para tomar urgentes medidas de conservación adecuadas.
Foto 6Remanente de bosque del Espinal con exclusión de ganadería. Obsérvese la invasión de enredaderas cubriendo toda la vegetación. Establecimiento del Sr Grant, vecindades de Noetinger. (Archivo: "Invasión de enredaderas")